Pasifae cuerpo de falsa virgen, en grandes cópulas bacanales,
Sueño alucinante de poses de bestia asesina, en cósmicos y vesánicos viajes psicotrópicos.
Pasifae madre de lo absurdo,
entre coitos y falsas nupcias,
sueño de siniestros lujos en indómitos fuegos que son Pasifae, lentas prolongaciones de mis sentidos hechizados, ejecutados a menudo sobre tu espalda lechosa, que te lamenta por las calles, sola y golpeada,
porque la bestia seguramente arremetió encarnizada en contra de tu naturaleza que suele ser devastada y cálida, porque las leches allí depositadas cubren hasta el tope de tu vientre, en donde tu pequeña bestia se alimenta enardecida y asomada por los matinales desgarres que te asolan cada vez que te cubres de tus fantasías de armazones y falsas células que lo engañan todo.
Pasifae déjame ser la bestia que te atraviese todo, que irrumpa lejana en tu madriguera de mentiras y exceso.
Pasifae el sueño termina entonces,
tu cintura y tus muslos facilitan la embriaguez que poseo en mi boca,
en brutales sacudidas que nos vuelcan arrítmicos sobre osadas danzas
siderales, que resucitan en mí a la bestia que te devasta y que me invita al viaje como un gusano devorador.
AL ACER LA TARDE
Hace 16 años.
2 comentarios:
Pasifae debierá ser aún bendecida entonces:uno puede sentirse extraviado, con placer de esa falsa virgen. Ohhhh, ya quisiera encontrarla para mí, ser una bestia y atravezar hacia un dolor purificado.
Lo leo después de años y sigue siendo el poema bestial y rosa que adoro de tu pluma.
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