miércoles, noviembre 11, 2009

MOSCAS

Cuando pienso en la forma de la muerte,
Comprendo que de algún modo yo también estoy muerto,
Entonces una mosca se posa en mi cabeza o en alguna parte de mi habitación,
Y el silencio que precede a ello es la ventana cerrada por donde trato de escapar.

A veces paso largo tiempo observando a las moscas,
Vuelan bajo,
Rápido,
Huyen de sí mismas y van hacia ellas mismas,
Entonces pienso que también de alguna manera mis amigos están muertos,
Que ellos y yo somos moscas,
Huyendo siempre de nuestros mortales enemigos,
Vomitándolo todo por doquier,
Protegiendo, devorando y anidando en nuestros muertos,
Cayendo deliberadamente en las trampas más dulces,
Sólo para dejar nuestros excrementos y darnos a la fuga.

Cuando observo a las moscas,
Pienso en los hombres solitarios que se encuentran en habitaciones solitarias bebiendo un tinto barato,
Abandonados por sus mujeres,
Despedidos,
Agotados por el tiempo,
Viajando a través de su mente,
Escuchando la música de sus estómagos hambrientos,
También ellos son moscas,
Merodeando a la muerte que no los toca,
Conteniéndose en la locura,
Respirando hondo,
Desconfiados del mundo.

Cuando veo pasar una mosca pienso en que algo ha estado muerto demasiado tiempo.